28.2.08

Dia 1 – El albergue.part2.ams

Part1: “La ida”

Con poca dificultad llegamos a la calle Warmoestraat, estaba a 2 minutos de la estación, así que no tuvimos ningún problema… bueno, nuestro primer contacto con las bicis asesinas que también aparecían de la nada por todas partes como los tranvías, e íbamos molestando un poco arrastrando las maletas, como unos novatos guiris, ocupando inocentemente los carriles bici.

Justo al llegar a la calle ya se veía nuestro albergue: el Youth Hostel Meetingpoint:





La recepción, el bar y las escaleras

Nada más entrar en la recepción, notamos “el olor sospechoso”, era la hierba mágica del país y es que ese albergue precisamente era “amigo de la marihuana” como bien indicaba un cartelito que había en la derecha y el póster de Bob Marley situado en la izquierda. Muy hippie la primera impresión. El recepcionista, sino recuerdo mal era uno de los “pakis”. Comunicándose con Edu en inglés, pagamos lo que faltaba y nos dio el número de habitación y de cama a cada uno.
Habitación 62 (planta 3), 8 camas, 4 literas y 7 ocupantes, ¿dormiría alguien más con nosotros? Un misterio que se resolverá en los próximos capítulos.

Pues bien, después de adaptarnos al olor que ya había dado tiempo de meterse dentro de nuestro cuerpo, proseguimos la marcha hacia la habitación cargados con las maletas. Para ello había que cruzar por el bar, donde había 2 ordenadores para conectarse a internet (1€ media hora) a la izquierda, la barra a la derecha, mesas a la izquierda con más españoles incluidos (el albergue estaba lleno de españoles) y un billar y “especie de futbolín” al fondo.



La barra del bar, con el “paki” barman


Llegamos a la puerta que nos conducía a las escaleras mortales que teníamos que subir con las “maletorras” y 3 tramos de ellas que nos esperaban hasta llegar a la intrigante habitación.



En la foto podéis observar las escaleras asesinas, el primer tramo era el peor. Estaban decoradas con esa especie de graffitis abstractos, era muy juvenil la decoración… molaba, bueno, igual que el albergue en general, justamente para jóvenes.Y al fin llegamos a nuestra planta, con los brazos medio rotos, respirando con dificultad por el cansancio.



Habitación 62, a la derecha!



Y esos eran los famosos “security lockers”, los curiosos y esperados bidones/barriles de metal que usaríamos de armarios para guardar nuestras maletas mientras nuestra ausencia visitando la ciudad. Les encontramos un par de utilidades más: el apoyo para hacernos los bocadillos de la cena y también para hacer fotos automáticas.
Aquí veis un ejemplo de las cenas que nos montábamos ahí xD:



El típico “pa amb tomàquet i oli” català jeje, estaban aceptables (el pan no era lo mismo xD), aunque los últimos días ya cansaban un poco. Cenábamos casi cada día (por no decir todos) allí, en la habitación, aunque fuera algo estrecha…era una auténtica cena familiar ^^.

Las vistas

Cuando te asomabas a la ventana de la habitación y mirabas hacía abajo, veías el albergue estaba justo tocando el agua con algunos que otros cuackens. Las vistas no estaban nada mal, veíamos la estación y la calle principal de la ciudad que llevaba a la plaza central.





Y de noche:



Los ratos en el albergue

Podemos decir que en el albergue no pasábamos muchas horas, no era plan de ir de turismo a una ciudad y quedarse todo el día metidos allí. Aunque al acabar el día estábamos deseando muchas veces de pillar las camas y/o de pasar un rato de ‘tranquis’ en el bar de allí. Jugando al UNO, al billar, leyendo, comentando el día, mirando Internet un rato, planificando la ruta o las visitas de los días siguientes…



Las noches allí eran tranquilas, las conversaciones antes de ir a dormir, inolvidables e irrepetibles (siempre recordaré las alemanas y velcro, buenísimo!), aunque hacía mucho calor!

El desayuno siempre lo hicimos allí, estaba muy bien, por 2,5 € teníamos todo lo que podéis ver en esta foto: 3 tostadas, mantequilla, mermelada, un huevo duro, una loncha de queso, y el café con leche (que por cierto, no me gustaba, y después del viaje, ya me gusta, porque no había mucha cosa más para elegir xD):



Curiosidades

Por otra parte, los lavabos! Había uno para cada planta y cada género, masculino y femenino con dos váteres y dos duchas. Tantas críticas a los lavabos vimos en los comentarios de la página web del albergue que teníamos un poco de miedo a lo que pudiéramos encontrar. Pero resulta que estaban genial, bueno, aceptables dentro de lo que nos esperábamos. Estaban limpios, la ducha era amplia e individual, aunque costaba un poco graduar la temperatura del agua, pero no era para tanto como en los previos comentarios leídos. Las chicas no tuvimos mucho problema de espacio porque sólo éramos dos y no muchas más en la planta, sólo se colapsó un poco un par de días por la mañana. (no hay fotos)

No había enchufes en la habitación! Así que con toda la planta teníamos que compartir los dos que había en los lavabos y el de la escalera. Pero sobrevivimos bastante bien jaja.

Y por último, mencionar al chino del albergue. Creemos que vivía ahí, siempre estaba abajo, solitario, en el bar. Con sus macrocascos escuchando música, liándose sus porrillos y fumando tan feliz, supongo que encontrándose a sí mismo, cada día lo mismo. Cuando no lo veíamos por allí pensabamos seguro que estaba en busca de ‘material” o durmiendo. (tampoco hay foto)

Ostras! Casi se me olvida otro de los personajes más vistos por allí, la mascota del albergue. Scofield! (en honor al prota de Prison Break, no recuerdo por qué) Era el gato blanco que nos solíamos encontrar en las escaleras por las mañanas, cuando salíamos, y por las noches, cuando volvíamos. Tenía una enorme agilidad. Vivía allí.





Varios perfiles de Scofield


Creo que no me he dejado nada, sino ya están mis acompañantes de viaje para recordar lo olvidado en los comentarios, a que si? xD
La verdad que fue muy agradable la estancia allí. Barato, limpio y bien localizado. No me importaría volver.

…to be continued...próximo capítulo: Paseo por los alrededores

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pues yo tampoco tengo ni idea del origen del nombre de Scofield, eso si, tenía una mala leche..no quería salir en las fotos ¬¬
En cuanto al hostage, no tengo nada que objetar, para lo mal que pensabamos que iba a estar, resultó ser genial, y los desayunos intercambiables me encantaron (diga lo k diga Malest) ^^
Espero mas cronicas (y si, en cuanto me acuerde y este en casa) te mando la foto que te falta ;)